Ante la reciente escalada del conflicto en Israel, informamos que las operaciones logísticas aéreas y marítimas vinculadas a esta región están presentando limitaciones críticas en la operatividad. Esta situación no solo afecta directamente a los envíos con destino u origen en Israel, sino que también puede generar repercusiones en rutas internacionales que cruzan por el Medio Oriente.
A continuación, les compartimos un resumen actualizado de los principales impactos y consideraciones operativas:
Transporte Aéreo
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El espacio aéreo israelí fue cerrado oficialmente desde el 13 de junio como medida de seguridad.
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Todos los vuelos de carga desde y hacia el Aeropuerto Ben Gurion (TLV) están suspendidos hasta nuevo aviso.
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Aerolíneas clave como Etihad, El Al, Lufthansa y KLM han cancelado temporalmente sus operaciones en la zona, lo que limita severamente la capacidad de transporte aéreo disponible.
Este escenario puede ocasionar reprogramaciones, demoras en tránsito, aumentos de tarifa y restricciones de reserva para vuelos con conexión directa o indirecta con la región.
Transporte Marítimo
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Los puertos de Ashdod y Haifa continúan operativos, pero varias navieras han comenzado a redireccionar rutas o están retrasando salidas y arribos por motivos de seguridad.
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Se han reportado posibles recargos por riesgo de guerra, así como limitaciones de espacio debido al desvío de servicios hacia otros puertos en la región.
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Las rutas marítimas que atraviesan el Mediterráneo Oriental podrían también verse impactadas por el conflicto, dependiendo de su evolución.
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